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Diana Carolina García todavía recuerda la última vez que vio a su hijo Harold Aroca, el joven de 16 años cuyo asesinato estremeció a la localidad de Santa Fe en Bogotá el pasado 5 de agosto. Este viernes, casi cuatro meses después del crimen, recibió una noticia que, aunque no le devuelve al adolescente, sí le da un respiro en medio del duelo.
“Realmente esto me llena de mucha felicidad porque me doy cuenta de que la muerte de mi hijo no va a quedar impune. Obviamente eso no me va a devolver a mi hijo. No es el único, faltan más. Me siento bien de que estén cayendo las personas que me hicieron este daño”, dijo la madre, tras confirmarse la captura de Anderson Pinzón Pedraza, uno de los hombres señalados de participar en el secuestro, tortura y asesinato de Harold.
La detención de Pinzón Pedraza se produjo sobre las 11 de la noche del viernes 21 de noviembre en Bogotá. Con él, ya son dos los procesados por este crimen que causó indignación en la ciudad, pues el menor fue hallado sin vida en una zona boscosa del barrio Los Laches cuatro días después de su desaparición.
Según la Fiscalía, Pinzón Pedraza habría participado en la retención y posterior traslado del adolescente a un lugar donde fue sometido a “actos degradantes” antes de ser atacado con arma de fuego. Las autoridades lograron identificarlo gracias a videos de cámaras de seguridad, en los que aparece en el sector donde Harold fue visto por última vez.
Tras su captura, el señalado fue llevado a la URI de Puente Aranda y posteriormente presentado ante un juez para la imputación de cargos.
La Fiscalía le atribuyó los delitos de homicidio agravado, tortura agravada, secuestro simple, y fabricación, tráfico o porte de armas de fuego y municiones. Pinzón Pedraza no aceptó los cargos, pero una juez de control de garantías ordenó que fuera enviado a un centro carcelario mientras avanza el proceso.
Un crimen que buscaba silenciar
El caso de Harold ha generado especial preocupación entre las autoridades. De acuerdo con la investigación adelantada, el homicidio habría sido una retaliación por los cuestionamientos y señalamientos que el joven hizo sobre el actuar ilegal de una organización delictiva con presencia en Los Laches, un sector ubicado en la localidad Santa Fe de Bogotá.
El menor fue visto por última vez en un parque del barrio, en compañía de varios hombres. Su cuerpo apareció cuatro días después en una zona boscosa, marcando el inicio de una investigación que hoy comienza a arrojar nuevos resultados.
Mientras avanza el proceso judicial, la madre de Harold insiste en que seguirá exigiendo justicia. “Mi hijo tenía apenas 16 años y lo único que quiero es que se sepa toda la verdad. Que paguen todos los que participaron”, dijo.
