Estalla polémica en Cámara por alud de contratos en recta final de Dirección Administrativa

En esta semana y días antes de la instalación del Congreso de la República, la Cámara de Representa se ha destacado por la llamada 'contratitis' para la ocupación de nuevos cargos dentro de la corporación.

A pocos días de que Carolina Carrillo entregue la Dirección Administrativa de la Cámara de Representantes, y desde el pasado 13 de julio, se han firmado más de 22 contratos para diferentes cargos profesionales y asesorías dentro del Congreso.

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En una directiva que fue enviada a todos los representantes a la Cámara, firmada por el presidente de esa corporación legislativa, Carlos Cuenca, la directora administrativa, Carolina Carrillo y el secretario general, Jorge Humberto Mantilla, señalan las razones de la necesidad de proveer nuevos cargos antes de finalizar esta administración el 19 de julio.

"Teniendo en cuenta que el objetivo de esta administración es garantizar la suficiencia de la planta del personal para el buen funcionamiento de las diferentes dependencias y promover los ascensos de los funcionarios al interior de la entidad, resolvimos reanudar, a partir del 13 de julio de 2020, los concursos para proveer cargos vacantes en encargos en la Cámara de Representantes", señala la directiva.

Existen contratos que van desde los dos millones de pesos hasta los 10 millones mensuales. Entre estos cargos se encuentran el de asistente administrativo grado seis, profesional universitario grado seis, asistente de gaceta grado cinco, entre otros cargos.

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Estos contratos se celebran en medio de la polémica por la reciente designación que hizo el partido de la U del nuevo director administrativo, John Abiud Ramírez, quien fue alcalde de Girón y que ha sido objeto de escándalos durante su administración en ese municipio de Santander, por posible malversación de dineros públicos.

John Abiud es señalado por realizar una fiesta familiar con el cantante vallenato, Silvestre Dangón, utilizando supuestos dineros públicos y la construcción incompleta de una biblioteca por 2.500 millones de pesos.