Exfiscal Luis Gustavo Moreno seguirá como "testigo clave" en cartel de la toga
Un juez de control de garantías prorrogó por un año más el principio de oportunidad firmado por el exjefe de la Unidad Anticorrupción.
El juez noveno de control de garantías de Bogotá prorrogó por un año el principio de oportunidad firmado entre la Fiscalía General y el exjefe de la Unidad Anticorrupción del ente investigador, Luis Gustavo Moreno.
Con esta decisión, Moreno -quien se encuentra pagando una condena en los Estados Unidos- seguirá siendo testigo clave de la Fiscalía en los procesos que se adelantan por el escándalo del 'cartel de la toga'.
En la diligencia, el funcionario determinó que la colaboración del exfiscal ha sido clave en diferentes procesos penales, señalando que todavía puede entregar más información sobre este caso de corrupción en el interior de la Rama Judicial.
En este sentido señaló que su declaración es piedra angular de las acusaciones presentadas en contra de un grupo de exmagistrados, congresistas, gobernadores, entre otros aforados.
En la actualidad, se adelantan cerca de 40 investigaciones en la Corte Suprema de Justicia y la Fiscalía General, en las cuales la declaración de Moreno ha sido fundamental.
Con esta decisión cesa la persecución penal en Colombia contra Moreno por los delitos de concierto para delinquir, cohecho por dar u ofrecer (sobornos) y utilización indebida oficios privilegiada.
El exjefe de la Unidad Anticorrupción es testigo de hecho en los perocesos que se adelantan contra los exmagistrados de la Corte Suprema, Gustavo Malo Fernández y Francisco Javier Ricaurte, así como contra los excongresistas Álvaro Ashton y Musa Besaile.
En enero de 2019, el exfiscal fue sentenciado a cuatro años de prisión por la Corte Federal del Sur de la Florida (Estados Unidos) después que aceptara su responsabilidad en los delitos de conspiración para lavar dinero, conspiración para cometer fraude en giros bancarios y fraude bancario.
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Según la investigación, Moreno contactó en un aeropuerto de Miami (Estados Unidos) al exmandatario departamental para presionarlo para que le entregara 100 millones de pesos. Toda esta conversación fue grabada por agentes de la DEA, organización que había sido contactada previamente por Lyons.
El 9 de marzo de 2018, la Sala de Casación Penal condenó a cuatro años y diez meses de prisión al exfiscal Moreno por los delitos de concusión y utilización indebida de información privilegiada; cargos que aceptó en la acusación, por lo cual recibió una rebaja en su condena.