En su momento, la Fiscalía General de la Nación de imputó cargos por el delito de abuso sexual en persona en incapacidad de resistir.
Dentro de los argumentos del despacho para a absolver a Gámez, se manifestó existieron carencias probatorias del ente acusador contra del religioso.
Dicha determinación judicial también cobijó a sus colaboradoras Tatiana Tulcán y Alexandra Castro becerra.