McGregor se armó tremenda fiesta tras ser derrotado por Mayweather

Conor McGregor tomó con buen ánimo el resultado de su pelea ante el boxeador estadounidense Floyd Mayweather, pues después de su combate, el peleador irlandés organizó una gran fiesta.

En las imágenes que ESPN ha difundido se puede ver que McGregor realizó una celebración en un club privado, donde se divirtió en compañía de varios amigos y compatriotas. De hecho el peleador también fue el animador del evento, pues en varios momentos tomó el micrófono para dedicarle unas palabras a sus invitados.

Conor McGregor, que perdió ante el púgil estadounidense Floyd Mayweather por nocáut técnico en el décimo asalto del combate en el que debutó como boxeador, consideró que la pelea "fue divertida" pero que el árbitro "se precipitó" al pararla.

"Fue una pelea divertida y espero que todos ustedes la hayan disfrutado", declaró McGregor, que reivindicó que podía haber continuado en el combate y lamentó que el árbitro le cortase el ritmo cuando mejor estaba.

Mcgregor reconoció, con todo, que el campeón invicto estadounidense siempre tomó buenas decisiones sobre el cuadrilátero.

"Tengo que darle crédito porque sus golpes fueron muy precisos", admitió sobre su rival.

McGregor reiteró que se sentía satisfecho con el intercambio de golpes y por haber forzado a Mayweather a comportarse como un púgil mexicano que siempre ataca para conseguir la victoria.

Por su parte Floyd Mayweather aseguró que se retira tras vencer por nocaut al irlandés Conor McGregor en el T-Mobile Arena de Las Vegas.

"Está decidido, no vuelvo más. Esta ha sido mi última pelea. Esta es una decisión que le debo a mi familia y que voy a cumplir. Me voy 50-0. Ya está, es hora de partir", declaró "Money", de 40 años, al finalizar su pelea contra la estrella de las artes marciales mixtas (MMA).

Con este triunfo, Mayweather deja los cuadriláteros con una inmaculada tarjeta de 50 victorias y 0 derrotas, superando al legendario púgil italo-estadounidense Rocky Marciano (49-0).

El norteamericano rechazó las críticas surgidas en torno a su rival, quien hacía su debut en un ring de boxeo.

"Una victoria es una victoria, no importa cómo la consigas. Rocky Marciano es una leyenda y espero formar parte del Salón de la Fama algún día", añadió.

Mayweather explicó que tenía un plan para la pelea: dejar que su contrincante se fatigara con el paso de los asaltos antes de acabar con él en las instancias finales.

Con información de EFE y AFP