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En la vigésima entrega de los Grammy Latinos, Rosalía y su disco "El mal querer" fueron los grandes vencedores al arrasar y quedarse con los gramófonos latinos a mejor álbum, mejor álbum pop contemporáneo y mejor canción urbana, además de los galardones a mejor diseño y mejor ingeniería.
En esta gala se homenajeó a leyendas de la música latina como Celia Cruz, Juan Gabriel, Joan Sebastian y Soda Stereo. También incluyó presentaciones sorprendentes como la deVicente Fernández con su hijo Alejandro y su nieto Alex y momentos simbólicos como la entrega del premio de Persona del Año que Juanes recibió de su ídolo de infancia Lars Ulrich, de la banda Metallica.
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Como siempre la alfombra roja de los premios es uno de los momentos que más llama la atención porque por ella pasan algunos famosos con pintas descabelladas mientras otros deslumbran con sensualidad.
Otras de las que sorprendió fue Mon Laferte, quien ganó como mejor álbum de música alternativa y llegó a la alfombra roja de la gala y dejó sus senos al descubierto con un mensaje en protestas con lo que vive su país Chile. "En Chile torturan, violan y matan" en letras negras y mayúsculas.
Por su parte, Bad Bunny, quien es uno de los que siempre se lleva las miradas,lució un traje en terciopelo que difuminaba el color de oscuro a claro y luego en la tarima al recibir su premio vistió una pantaloneta a cuadros con un chaleco particular.
"Chile, me dueles por dentro, me sangras por cada vena, me pesa cada cadena que te aprisiona hasta el centro, Chile afuera, Chile adentro, Chile al son de la injusticia, la bota de la milicia, la bala del que no escucha no detendrá nuestra lucha hasta que se haga justicia", leyó Laferte sobre el escenario.
Por su parte, Bad Bunny se llevó el premio a mejor álbum del género urbano, en medio de los gritos de protesta de algunos de sus colegas que se consideraron discriminados en las nominaciones.
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Al recibir su premio, tomando un té, fijó posición sobre la polémica. "Hay personas a las que les cuesta todavía aceptar que el reguetón es un género establecido que lleva más de dos décadas", dijo. "A la misma vez digo a muchos colegas que se han vuelto un poco monótonos: se ha perdido la pasión, se está haciendo música por generar números, views (vistas en redes sociales) y se está olvidando la esencia".
Alejandro Sanz se fue también con tres estatuillas, incluidas la de mejor grabación por "Mi persona favorita", que hizo con Camila Cabello. Juan Luis Guerra terminó con dos galardones, al igual que los puertorriqueños Pedro Capó y Kany García, y el argentino Andrés Calamaro.
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