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El metro de Bogotá: ¿otro anuncio o realidad?

Fernando Rojas, politólogo con maestrías en gestión urbana e historia, debatió con Daniel Páez, ingeniero civil, doctor en ingeniería y profesor de la Universidad de los Andes.

Publicado:
Actualizado:
Lunes, Septiembre 19, 2016 - 10:03

Escuche aquí el debate 


 



El contexto


 



Enrique Peñalosa, alcalde de Bogotá, explicó en LA F.m. cómo será la construcción de la línea del metro elevado que se desarrollará durante su cuatrenio y que estará lista en su totalidad en el año 2020.


 


Peñalosa manifestó que se espera firmar el contrato de construcción en el segundo semestre de 2017 e iniciar obras en 2018. “Lo que vamos a lograr es que más bogotanos se vean beneficiados por el metro. Por esa razón, el sistema hará 990.000 viajes diarios, adicionales a los de TransMilenio en la actualidad, gracias a que el metro irá acompañado de troncales alimentadoras en la Avenida 68, la Avenida Boyacá y la Avenida Ciudad de Cali", aseguró.


 


Peñalosa también explicó los motivos por los cuales cambió su posición frente al metro, pasando de quere uno subterráneo a uno elevado. "Uno aprende con el tiempo, la tecnología ha cambiado mucho y un metro elevado genera menos ruido. Además, la gente podrá ver y disfrutar de la vista e incluso se necesitan menos predios para un metro elevado". Según dijo, el "Metro de Bogotá será casi que volar bajo sobre la ciudad".


 


Así mismo, el mandatario habló sobre la nueva medida que tomó la Alcaldía de Chia frente a las restricciones de carga. "Una  ciudad moderna necesita que haya transporte de carga con algunas restricciones, pero no podemos sacar las industrias de la ciudad, debemos facilitar que los camiones entren a la ciudad. Con Chía necesitamos conexiones por eso estamos pensando en la ampliación de la Carrera Séptima y la Autopista Norte. Hay que mejorar la movilidad en el municipio, allá no hay nada de transporte masivo". 


 


Finalmente, el alcalde se refirió a las decisiones que se toman en su mandato frente a las corridas de toros en la capital. "Más allá de lo que yo piense, estamos obligados a cumplir las órdenes del megapoder de la Corte Constitucional que dio órdenes claras en las que asegura que hay que prestar la Santamaría para las corridas. Pero presentaremos un proyecto de ley para que no haya toros en la ciudad".


 


Los anuncios


 



"Así como le estamos diciendo sí a la paz, le estamos diciendo sí al metro de Bogotá", le dijo el presidente Juan Manuel Santos al alcalde Enrique Peñalosa, este sábado, en la Casa de Nariño, al revelar que las obras del sistema masivo arrancarán en el 2018.


 


Santos y  Peñalosa revelaron que el metro quedó diseñado desde el Portal de las Américas hasta la calle 127 con Autopista Norte, con una extensión total de 30,58 kilómetros. "El metro es un compromiso real. Ratificaremos esta decisión a través de un documento Conpes que estará listo en máximo un mes", aseguró Santos.


 


La construcción de la obra como tal se desarrollará en las siguientes tres fases: la primera va desde el portal de Las Américas hasta la Caracas, a lo largo de la Avenida Primero de Mayo. "El metro entrará en operación en 2022", aseguró Peñalosa.


 


La segunda fase irá hasta la calle 72 a lo largo de la Avenida Caracas, para completar una extensión de 25,29 kilómetros con un total de 15 estaciones (cabe anotar que la primera línea del Metro de Medellín tiene 25,8 kilómetros). La tercera fase de la construcción comprende el metro hasta la calle 127. "Se tomó la decisión de un metro elevado por varias razones.  La primera es que la devaluación ha cambiado el costo de un metro subterráneo. La segunda es por eficiencia; la tercera es por principio de integración de la ciudad y por último se ahorran cuatro billones de pesos", explicó Santos.


 


El sábado, el presidente Santos y el alcalde Peñalosa se comprometieron a sacar adelante las dos primeras fases, en sus respectivos gobiernos. El metro de Bogotá irá a una velocidad de 40,1 kms / hora (más rápido que el de Medellín). "Es mucho más agradable ir en un metro elevado, los ciudadanos se sienten mucho más seguros y la luz natural es más ecológica. Con este metro no dejamos a la ciudad con riesgos de sobrecostos que la vayan a dejar quebrada hacia el futuro, sobre todo por la dificultad del suelo bogotano", explicó Peñalosa.


 


El alcalde manifestó que se espera firmar el contrato de construcción en el segundo semestre de 2017, e iniciar obras en el 2018, antes de finalizar el mandato del presidente Santos. Las dos primeras fases estarían en 2022. Con la línea elevada es posible reducir en cerca de 26 meses los tiempos de construcción. "La Caracas tiene más posibilidades de redesarrollo urbano que la Carrera Décima y es mucho más ancha que la 11. La complementariedad con TransMilenio será muy útil para que los ciudadanos se puedan movilizar más lejos", explicó Peñalosa.


 


El alcalde Peñalosa destacó que para que una línea de metro beneficie a la mayor cantidad de personas posibles  debe estar complementada con rutas alimentadoras. Si eso no ocurre, el metro solo podrá ser usado por las personas que viven o trabajan cerca de las estaciones. "La construcción de troncales alimentadores permitirá que muchos más ciudadanos puedan usarlo, sobre todo en Bosa y Kennedy", explicó Peñalosa.


 


Por esa razón, el sistema hará 990.000 viajes diarios, adicionales a los de TransMilenio en la actualidad, gracias a que el metro irá acompañado de troncales alimentadoras en la Avenida 68, la Avenida Boyacá y la Avenida Ciudad de Cali. Esto es casi 500.000 pasajeros más de lo que movería el metro si fuera subterráneo. Y es más de los 820.000 pasajeros que mueve el Metro de Medellín.


 


Las troncales alimentadoras permitirán que los habitantes de Soacha, Bosa y Fontibón puedan usar el Metro. Gracias a ese sistema alimentador, los abordajes al metro ascenderán a 650.000 pasajeros al día, mientras que sin alimentadores serían del orden de 400.000. Las estaciones serán: Portal de la Américas; Carrera 80; Calle 42 sur; Kennedy; Avenida Boyacá; Avenida 68; Carrera 50; NQS; Nariño; Calle 1; Calle 10; Calle 26; Calle 45; Calle 63; y Calle 72. Diez de ellas tendrán integración modal con TransMilenio.


 


Peñalosa destacó que el metro será la columna vertebral de uno de los mejores sistemas de transporte público del mundo. Para el año 2030, el 80 por ciento de los bogotanos tendrá una línea de transporte masivo, metro o troncales a menos de 1 km de distancia. Este sistema complementado con más de 600 km de ciclo-rutas consolidará a Bogotá como una de las ciudades más sostenibles y eficientes en términos de consumo energético.


 


En total, el 75% de los recursos destinados al plan de transporte masivo para Bogotá se destinarán al metro y el 25 por ciento a troncales alimentadoras. Con la revisión de los diseños, se logró un ahorro significativo en el componente del metro, equivalente a 4 billones de pesos. Además, con los cambios en la tasa de cambio del dólar, el costo del metro subterráneo solo habría permitido llegar hasta la calle 53, con los recursos disponibles.


 


El metro será una herramienta fundamental de renovación urbana gracias a la integración de las estaciones con el entorno y al estímulo que se generará para la transformación de usos y mejor utilización del suelo.



Fuente:
Sistema Integrado Digital